23. noviembre 2021

Planificar el laboreo minero para obtener mayores beneficios y reducir el impacto sobre el medio ambiente

La planificación técnica del laboreo minero es indispensable para mejorar los procesos de explotación hacia una mayor recuperación de mineral, utilizando racionalmente los recursos económicos disponibles y contribuyendo a reducir los impactos sobre el medio ambiente. El incremento del precio del oro a nivel internacional despertó con mayor fuerza el interés de cooperativas mineras que buscan el mineral en áreas nuevas o antiguas, incluso en desmontes que no tenían mucho interés económico y que hoy vuelven a ser atractivos.

Generalmente, los suelos de estas zonas son removidos sin un análisis o planificación técnica previa, obteniendo poca ganancia debido a que el material removido no tiene los contenidos de oro necesarios para que la explotación sea rentable. Además de estos resultados negativos en la obtención de beneficios y utilidades, se generan impactos adversos innecesarios sobre el medio ambiente, afectando el paisaje, la biodiversidad y los ecosistemas.

Como parte del proyecto “Implementación de medidas de producción más limpia en el sector aurífero de la cuenca alta del rio Suches”, las cooperativas mineras Águilas de Oro y Tierra Hermosa avanzan en incorporar una planificación técnica que toma en cuenta aspectos esenciales para hacer más eficiente el laboreo minero. 

Richard Zenteno Pocoata, geólogo del proyecto, destaca tres actividades de planificación del laboreo minero: el mapeo geológico, para identificar sectores de interés minero, el transporte de mineral en cantidad y calidad necesarios, y la adecuada concentración artesanal para una óptima recuperación. Estos aspectos se complementan, de manera transversal, con una rehabilitación paulatina de áreas intervenidas. El mapeo y estudio geológico consisten en identificar de manera horizontal y vertical los sectores que tienen contenidos de oro en veneros con mayor valor económico y así explotar o remover solo las áreas con mayor potencial. “Antes de iniciar los trabajos mineros, sobretodo antes de implementar los equipos mineros o adquirir maquinaria pesada, es necesario conocer las características mineralógicas de los veneros a ser explorados y explotados, así como el contenido de oro que habrá (por metro cúbico o por volqueta)”, explica Zenteno.

El transporte interno hacia el lugar donde se realiza el lavado del material también es importante, pues se debe llevar el material a lugares cercanos, los costos de transporte no deben ser muy altos y para esto se debe considerar el uso necesario de maquinaria y el desplazamiento de la cantidad de volquetas. Para un lavado eficiente del material debe haber suficiente agua, y es una actividad que requiere de un tiempo adecuado para retener inclusive el oro fino. La decisión de la cooperativa en cuanto al buen uso de agua, es clave, recomendando que esta pueda ser siempre recirculada.

En lo que respecta a la rehabilitación, la actividad minera a cielo abierto, concretamente mediante la excavación de pozas, requiere maquinaria pesada e impacta fuertemente en las zonas donde se desarrolla y en sus recursos naturales. En ese sentido, además de planificar la explotación y producción minera, se debe pensar en rehabilitar los espacios afectados. El material descartado, luego del proceso de concentración, debe ser devuelto a su lugar de origen para no afectar el paisaje natural. “Ahora les decimos a los mineros que cuando hagamos el proceso de lavado o de concentración mineral, no lo dejemos ahí, ese material debería volver al lugar de donde fue sacado para que, de alguna manera, podamos recuperar ese paisaje que se esta dejando como hueco. Se debe rehabilitar esa área al menos en un 70% con el mismo material de desmonte y colas de lavado, estamos recomendando una rehabilitación de áreas como algo imprescindible”, afirma Zenteno.

Actualmente el proyecto cuenta con el mapeo y estudio geológico que identifica las áreas donde es más favorable la presencia del oro para una operación minera rentable. En una primera etapa, se identifican los veneros que tienen contenidos interesantes y económicos, para luego planificar los costos de explotación y transporte. Posteriormente se optimizará la concentración mineral artesanal, determinando primero los equipos necesarios para recuperar, en lo posible, todo el oro presente en los veneros, además de realizar una rehabilitación secuencial de los sectores explotados. Finalmente, es muy importante que cada día se practique la seguridad industrial en todas las áreas mineras; este aspecto también está vinculado con un laboreo minero responsable.

Estas acciones se desarrollan en el marco del proyecto que es ejecutado por MEDMIN, en alianza con Wildlife Conservation Society (WCS) y Swiss Better Gold Initiative (SBGI), en coordinación con el SERNAP, a través del ANMIN Apolobamba, y financiado por el proyecto Gestión Integral del Agua de la Cooperación para el Desarrollo de la Embajada de Suiza en Bolivia que implementa HELVETAS Swiss Intercooperation.

Mayores informes:

Cristina Pabón Escobar
Responsable de comunicación estratégica para proyectos de minería y fuegos.
Wildlife Conservation Socierty - Programa Bolivia
cpabon@wcs.org

Rigliana Portugal
Especialista en Comunicación y Gestión del Conocimiento 
HELVETAS Swiss Intercooperation
rigliana.portugal@helvetas.org 
Facebook: @Helvetas.bo
Twitter: @HelvetasBolivia
Youtube: @HelvetasBolivia
Fotos: HELVETAS Bolivia/Gestión Integral del Agua

 

 

Información adicional:

Gerente del Suprograma de Desarrollo Económico y Emprendimientos Inclusivos de HELVETAS en Bolivia. Director del proyecto Gestión integral el agua de la Cooperación Suiza en Bolivia. Economista con experiencia en la gestión de proyectos relacionados al manejo sostenible de recursos naturales con énfasis en agua con un enfoque multidisciplinar, donde ha abordado temas de planificación territorial sensible al cambio climático y con enfoque de cuenca, promoción y desarrollo de procesos participativos multiactor para la definición de políticas públicas locales y nacionales sobre gestión integral del agua, alineamiento y consolidación de políticas públicas, así como el impulso a iniciativas locales para el aprovechamiento sostenible de recursos naturales. También se destaca su capacidad de articulación de diferentes espacios de coordinación de asistencia entre múltiples donantes en el sector de agua y cuencas. Finalmente ha impulsado y desarrollarlo diferentes procesos de sistematización de experiencias y de gestión de conocimiento a partir del trabajo desarrollado en campo.